" Necesito un regalo para una persona muy especial!. Es una mujer y me salvó la vida". Así fue como recibí este encargo, así de directo y de emotivo. Y es que esta profesión me ofrece la posibilidad de tener una experiencia diferente en cada pintura. El hecho de ver que valoran tu trabajo hasta el punto de pensar que sería el mejor regalo como agradecimiento por haber vuelto a la vida, no tiene precio.
Este fular se creó para regalar como agradecimiento a una oncóloga, porque sólo una persona apasionada por su trabajo puede conseguir grandes milagros.